12 de octubre de 2011

Yo no tuve muñeca vestida de azul,

pero si una ratita presumida

a la que le hice una camita de algodón .

Yo no quería ir al colegio

porque no me salía la letra "o"

tenía miedo a la oscuridad

y soñaba que me perseguían los monos

de las sábanas de mi hermano.

Yo grababa programas de radio

en los que hablaba

de la relajación.

Tenía seis años y siempre te pedía que me hicieras una cocinita de madera.
Hoy es vacío soleado, pero a la vez oscuro y triste. La ventana medio abierta medio cerrada deja entrar moscas con ojos verdes. Verdes como demonios verdes. Cerrada o abierta, mi ventana, tu ventana, las ventanas. Suena una canción que no tiene nombre, un espejo en el que nadie se mira, todo lo que sube, baja. Tengo miedo de fantasmas transparentes que tejen mi destino, si es que lo hay, si es que existe. Si es que existes, existo, existimos. Gente pasa por las calles, gente, en todo el mundo, pero... ¿quién habrá pisado esta hierba por vez primera?