15 de abril de 2017

Indefinido                       se ha caído                 por las escaleras.

Los peldaños ya no sujetan                  sus pies indefinidos.

Y se cae, claro, constantemente.

Y todo sigue siendo igual para todos:

el perro que ladra es guiado por la señora que guía,
el bus que acelera está siendo perdido por el niño que corre,
la maestra que enseña, enseña
y los pingüinos cantores, pingüinean.


Solo Indefinido cambia.          Deviene.           Como el mundo.        Que también deviene.


Pero nadie se da cuenta.

Indefinido quiere volver a la escuela. Pero en la escuela no admiten personas como Indefinido. En la escuela solo admiten personas concretas.

Lo indefinido da miedo.           Lo indefinido no gusta.           Indefinido está solo.

Indefinido no tiene amigos.
Indefinido nunca va a poder ser presidente.

Indefinido quiere acabar con su indefinida vida.     Porque nadie la ve.     Porque nadie la siente.
Porque es invisible.


Indefinido es

indefinido.


14 de abril de 2017

Siento unas manos que me acarician,
unas manos que me acompañan en esta danza terrestre.
Y vienen siempre conmigo. A veces me asombro de que sigan a mi lado.
Porque ya son mayores. Y a veces parpadean y no las siento tanto. Y me asusto. Y pienso en que algún día se irán para siempre.

24 de marzo de 2017

É un bicho

Din que un home é un home
e que un gato é un bicho.

Hoxe encareime a ti coma nunca antes o fixera.
Din que eran para un cesto e que te botaches para atrás
do medo que tiñas.

Eu non o vin
cegueime,
coa carraxe.

Din que é así,
que dous non discuten se un non quere.

Pero eu quería
e así saíu.


Din que un home é un home
e eu...
un bicho.

15 de enero de 2017

Desapareces

Hoy veo las cosas
que desaparecen.

Veo el humo, el calor, el amor...


Y,
de pronto,
te veo a ti y me asusto.

—¿Qué haces aquí?—te pregunto.
—Me han mandado venir... un segundo.

18 de agosto de 2016

Olvido

Pongo la maleta
roja 
en la puerta

para que no entres
de noche
si te despiertas.

Para que no me digas
que ves fantasmas
que llevan luces
que vienen a por ti

para que no te olvides de
escribir
de las letras
de las vocales
ni de mí.

26 de julio de 2016

Y los monstruos


Los monstruos aparecen
en el bosque
y se acercan.

Me persiguen
y me dicen

que me vaya
que me vaya
que no vuelva.

Llego a un claro
que es oscuro
y los monstruos.

Me siguen
y me dicen

que no siga
que no siga
que no puedo

Vuelvo al camino
parece eterno
y ellos vienen.

Me acorralan
y me dicen

que me gire
que me gire
que ya muero.

24 de noviembre de 2012

Llorona

Los acordes salían de la guitarra,
y de tu alma brotaron tímidos versos, tímidos versos que te recordaban juventud
y los dijiste
en la escalera
que hace eco
y te oímos.
Cantabas a la Llorona.
Y salía de ti, por debajo de tu bigote blanco que imponía un poco,
y los dijiste,
los versos.
Y estabas apoyado a la puerta del primero
"me quitarán de quererte, pero de olvidarte nunca".
Y la guitarra lo hacía para ti
y si la magia existe
apareció, en tu voz.
Y yo no te había oído nunca cantar, y nadie.
Yo solo te veía leyendo el periódico o tomando fruta antes de comer porque es sano.
De pequeña, me hacías cocinitas, pero,luego, ya no me importaron las cocinitas
y ya no quería hacerte café.
Y  un día cantaste a la Llorona y dijiste que ya le habías dado la vida
y otro,
te fuiste.
Y yo no quise ir a verte porque pensé que volverías y no. No volviste nunca.
Y la Llorona sigue esperándote y a veces piensa que estás en el estadio viendo un partido, pero no es cierto, no estás. No estás en ninguna parte.
Y la Llorona me quiere enseñar fotos de ti porque dice que no quiere que te olvidemos.
Y los dijiste...

"No sé que tienen las flores, Llorona, las flores del campo santo, que cuando las mueve el viento llorona, parece que están llorando".

16 de octubre de 2012

Y  cuando eres azul, me gusta. Como el rojo, que también me gusta.
De pequeña solo me gustaban el rojo y el azul. Tú no me gustabas de pequeña, claro, porque no te conocía.
Pero si te hubiera conocido antes, me hubiera gustado la forma en la que haces la cama o la forma en la que cortas los tomatitos para la ensalada y les echas queso, también. O como estornudas.
¿Sabes? Siempre nos ha hecho gracia a mi hermano y a mi como estornuda nuestra tía Veri, y su diente que está mal colocado nos gusta también.
Tus dientes tampoco están perfectos. Pero a mi me parecen unos dientes preciosos. Porque sonríen, y muchas veces me sonríen a mi.
Hoy sonrieron mucho tus dientes, porque nos vimos por la tarde y nos hicimos cosquillas.
Cosquillas debajo de los brazos y en los pies, donde tienes muchas cosquillas aunque tú digas que no.
Y nos hicimos muchas cosquillas porque de alguna forma queríamos ser libres.
Cuando la gente es libre se puede reír. Se puede reír y puede llorar y puede hacer cosquillas, porque es libre.
Y nosotros nos hicimos cosquillas toda la tarde, y nos abrazamos mucho, hasta que nos dimos cuenta de que estábamos en la habitación abrazándonos y sentimos que somos.
Y cerraste los ojos. Y empecé a darte besos por la espalda.
Besos de futuro.